Diario de una opositora: Sin prisa, pero sin pausa.

Llevo semana y media como "opositora". En estos días he preparado-redactado casi cuatro temas. No es que sea mucho, pero como me han dicho varias lectoras con experiencia, esto no es un sprint, sino una carrera de fondo. Y no sé si seré yo, que soy muy mala para todo lo que tenga que ver con el ejercicio, pero considero que si empiezo a forzarme, agobiarme y meterme prisa desde ya, cuando lleguen los dos últimos meses antes de las oposiciones -cuando quiera que eso sea- voy a estar a dos metros bajo tierra. Tal y como yo lo veo, es mejor ir poco a poco, manteniendo un ritmo constante, aunque lento, para no abandonar a mitad de la maratón.

Esta reflexión viene por el casi cuarto tema. Hoy estoy con el tema 49, sobre la idea de justicia política en Platón.  He empezado esta mañana, y a las 19.00 de la tarde, con sus descansos correspondientes y demás -que, conste en acta, una servidora se distrae con el volar de una mosca- había casi acabado.  Me quedaban el último apartado y la conclusión por redactar, pero ya no estaba a lo que estaba. Intentaba leer el tomo de Historia de la Filosofía para conseguir los datos que quería incluir en mi tema, y no conseguía centrarme. ¿Solución? Dejarlo y sentarme con Jack a ver una peli. 

Soy un poco histérica y obsesiva para estas cosas, pero me niego a empezar a fustigarme ya. No toca.  No quiero convertirme en uno de esos opositores que se encierran en casa todo un año, o dos, o tres, con horarios estrictos, sin perdonar un día, una hora, o un momento de estudio. No quiero hacer algo que solo tenga sentido de cara a una virtual oposición y sobre todo si obtengo plaza.  Quiero vivir esto de tal manera que, si finalmente no hay oposiciones, o no me puedo presentar, o las suspendo, haya un equilibrio entre mi sensación de haberlo intentado seriamente y la sensación de haber vivido durante todo este tiempo, de no haber tirado un año, o dos, o tres a la basura.  

Esto no significa que no lo vaya a intentar, que no vaya a seguir unas determinadas rutinas, pero flexibles. Al menos de momento. Supongo que cuando se vaya acercando la fecha la sensación irá virando de este estadio zen en el que me encuentro ahora mismo (cosa rara en mí) a un estadio "ohdiosmio-ohdiosmio". Pero hasta que eso llegue, voy a tomármelo con calma y a disfrutar del camino. Mientras pueda. Lo dicho: sin prisa, pero sin pausa.

Comentarios

  1. Pues si, mejor así la verdad. Para que agobiarte ahora :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eso digo yo, y me sorprende, que yo soy muy de agobiarme XD

      Eliminar
  2. ¡¡Muy bien!! Así me gusta Bettie, con cabecita ;)
    Un besazo.

    ResponderEliminar
  3. Cuanto más tranquila estés, mucho más te cundirá, y desde luego para no desmotivarte es mucho mejor que tengas tus ratillos de ocio, de hecho a mí lo que me parece más duro de las oposiciones (desde la ignorancia de quien nunca se ha preparado ninguna) es precisamente eso: el estar a ocupación completa con ellas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo es que, directamente, no creo que pudiera hacerlo así. Conozco el caso de un chico que lo hizo, y sacó plaza a la primera y todo, pero para eso hay que tener una voluntad que yo no tengo xD

      Eliminar
  4. Bueno, y la peli... ¿te gustó? ¿cuál era? ;-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Matrimonio por conveniencia. Salian Gerard DePardieu y Andie McDowell, creo. Era viejuna, una comedia romántica XD :P Los canales de cine de la TDT son mi perdición XD

      Eliminar

Publicar un comentario

¡Adelante! Deja tu retal :)

Entradas populares de este blog

Cómo aprobé el nivel Avanzado de la EOI preparándome por mi cuenta.

Tontos-a-las-tres.

Libro: La edad de la ira, de Fernando J. López