Libro: Ahora que la vida, de Ismael Serrano.


Este poemario está en mi lista de lecturas en curso desde enero. Lo que he hecho ha sido ir leyendo cada noche un par de poemas o tres -y no todas las noches-, para no empacharme. Lo acabé ayer mismo, así que hoy he sacado un poco de tiempo para contaros qué tal. 

¿De qué va el libro?

El libro es una recopilación de poemas escritos por Ismael Serrano entre finales de 2010 y 2013. 

Hablando del libro...

A ver, ¿por dónde empiezo? ¿Por la impresión general? Pues allá va: el libro no me ha matado. Lo digo sin problema: aunque soy una grandísima fan de las canciones de Ismael Serrano, sus poemas, en general, no me han enloquecido. Hay excepciones, claro. 

Algunos de estos poemas ya los había leído, porque Ismael Serrano los había publicado en su blog. Otros no me sonaban. Bueno, miento, sí me sonaban. De las canciones. Ismael Serrano dijo en la presentación del libro en Valencia que, por lo general, primero escribía el poema y que de ellos salían las canciones. No siempre de un poema sale una canción, sino que una canción puede ser el resultado de unir versos de varios poemas.  Quizá esta es la razón por la que prefiero las canciones a los poemas: llevan algo más de trabajo. 

Lo cierto, y esto tengo es algo positivo, es que el poemario de Ismael Serrano sí me parece honesto, cosa que no se puede decir de toda la obra poética que pulula últimamente por el mundo. Me da la sensación de que son los poemas que alguien escribe porque sí, porque tiene la necesidad de escribir y eso es lo que le sale, aunque esto es una idea mía. Uno de los rasgos que me hacen pensar eso es que en los poemas que van seguidos a menudo se repiten metáforas o imágenes, como si el poeta estuviese anclado en esa obsesión en un determinado momento. De esos poemas hay algunos que, como he dicho, a mí sí me han llegado y me han emocionado, y otros que no. Con las canciones, sin embargo, me pasa lo contrario: son pocas las que no me emocionan. 

A lo mejor el problema es mío, y no de la poesía, ni de los poetas, ni de los poemarios, que podría ser.

Os dejo un trocito...

Es un fragmento del poema "Tener miedo", que es de lo que sí me han gustado mucho. A ver si os recuerda a alguna canción, o a parte de una canción, más bien.

Estar vivo, supongo, es tener miedo,
y sostenerle la mirada
a esas dudas que nos achican los pulmones,
a esa nada parecida
a la sensación del escalón olvidado,
la pendiente abrupta en el asfalto
viajando en el coche hacia una nube.
En resumen, este libro...

No le voy a poner cara, porque no sé, ninguna le hace justicia del todo. Me ha gustado, aunque no tanto como esperaba. Estoy segura de que parte del problema han sido mis expectativas. 



Por el momento voy a dejar de ladito la poesía hasta nuevo aviso. Procuraré seleccionar el próximo poemario con cuidado, porque estoy empezando a creer que la poesía ya no es para mí, y eso sí que no.


Comentarios

  1. Yo te puedo asegurar que la poesía(salvo honrosas excepciones) no es para mí. Y me parece feo decirlo porque suena muy nazi.
    Puede que tenga que ver con ser de cuadriculada(de una forma más estricta que facultativa, a decir verdad), o que debido a convenciones o a que yo soy muy de A a B por el camino recto, no me gusta el retoricismo de la poesía.
    Aún así le añades música y la cosa cambia, e Ismael Serrano en cuanto a esto último mola; mola.
    También decir que como poetas me gustan más que nada Quevedo, Góngora(que anda que no voy yo de contrarios), Bécquer y Rosalía de Castro(mucho más en gallego que en catalán). En poetas contemporáneos ando perdida totalmente, y a Rubén Darío no le trago.

    Así que aquí me quedo por ahora.
    Besos.

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    1. Menudas perlitas he soltado aquí por no revisar lo que escribo:
      tenga que ver con ser muy cuadriculada*
      mucho más en gallego que en castellano(catalán?????)

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    2. Claro. Yo me he quedado así: ¿Rosalía de Castro escribió en catalán? XDDDDD

      No sé, sí que cuando hablo de literatura con la gente, suele no ser muy fan de la poesía. A mí me ha gustado de siempre, aunque no sé qué me pasa últimamente...

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    3. Soy fan de tu comentario, Elefante XD

      A lo mejor has descubierto una faceta oculta de Rosalía de Castro... Por ejemplo, descubrí hace poco que Lorca había escrito en gallego y, precisamente, una conocida canción que también ha cantado Ismael Serrano (Chove en Santiago).

      Me sorprende, Elefante, que no te guste el retoricismo y, sin embargo, te guste Góngora xD Las Soledades o el Polifemo son un monumento a la complejidad poética.

      Sobre la poesía, creo que a veces arrastra la mala fama de una experiencia ingrata durante la vida escolar por el hecho convertirse en un instrumento para el análisis métrico, retórico, etc. Pero siempre he considerado que hay un poema para cada persona :)

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    4. En todo hay excepciones y Góngora con su preciosa nariz que es sinónimo de mi trompa...
      Nah, es broma. Realmente me resulta dificil de leer Góngora, pero me encanta.
      Y aquí ya a toro pasado digo que se me olvido mentar a Pedro Salinas.

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  2. Uffff... se me hace dura la poesía. Y al pobre Ismael le tengo como manía... Chorradas mías, estaba "de moda" en mis inicios universitarios y, como tengo que ir contracorriente porque sí... pues eso.
    Como a Elefante, me gusta más la prosa, por lo general. Creo que le cogí un poco de tirria a la poesía por eso de ponerme a analizar figuras retóricas en clase de lengua... Prefiero las cosas claras (y el chocolate, espeso), y llamar al pan, pan y, al vino, vino.
    Aunque reconozco que, a veces, me he quedado boquiabierta y ojiplática ante algún poema. O canción.

    Y las expectativas... qué malas son, ¿verdad?

    ¡Un besote gordo!

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    1. ¿Le tienes manía a mi Isma? Jo. Con lo bonico que es.

      Por cierto, el concierto del que me informaste, me persigue XDDDD

      Las expectativas son un arma de doble filo, sip.

      ¡Besotes!

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  3. A lo mejor ser tan fan-fan de sus canciones, no te deja formar una idea limpia de sus poemas... no sé...

    Yo es que no me doy puesto con la poesía; me da mucha pereza. No suele apetecerme leerla. Y aunque en el instituto era muy fan de Bécquer, hace años que no leo poemas...

    Pero, cosa curiosa, el otro día de noche me vinieron a la mente unos mini-versos y tuve que escribirlos... raro, raro... jajaja

    Un besote

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    1. Podría ser. Creo que en este caso mis expectativas han tenido buena parte de culpa.

      Bueno, a veces nos da un arrebato poético, qué le vamos a hacer. A mí me pasó el sábado, jajaja.

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  4. Te ha pasado igual que a mí con el libro de sonetos de Sabina XD O eso parece.
    ¡Un abrazo!

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  5. Cuántas ideas veo por los comentarios sobre poesía :)

    Yo tengo una relación extraña con la poesía... Tengo la idea, poco ortodoxa para un filólogo, de que no existe poemario perfecto. Hay poemas mejores y peores, y aunque es cierto que determinados poetas tratan de dar una integridad conjunta a sus poemas dentro de una obra, lo cierto es que eso no marca su calidad conjunta. Aparte, claro está, de las sensaciones personales de cada uno, que influye en la forma en que hoy leemos. Supongo que a Ismael Serrano le habrá pasado esto, unido a otro detalle que nos comentó un profesor de nuestra carrera: muchas veces los cantautores son buenos por la combinación de música y letra, pero eso no significa que sean buenos poemas en solitario (una idea similar al teatro: podemos leer una obra teatral, pero cuando realmente la "experimentamos" es cuando la interpretan).

    Al final, se trata de disfrutar de los poemas que más nos gustan (por el motivo que sea), especialmente si nuestra intención no es el estudio ;)

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    1. No, yo ya dejé el estudio de la poesía hace años atrás XDDD :)

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  6. Pues por lo que dices de que te gustan más las canciones que la poesía, creo que hay una cita del libro El nombre del viento que te gustará: «Recuerda esto, hijo mío, aunque olvides todo lo demás: un poeta es un músico que no sabe cantar. Las palabras tienen que encontrar la mente de un hombre si pretenden llegar a su corazón, y la mente de algunos hombres es lamentablemente pequeña. La música llega al corazón por pequeña o acérrima que sea la mente de quien la escucha.». Y sí, estoy que no cago con el librito, pero conforme te leía me vino a la mente esa conversación y tenía que dejártela. :P

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